martes, 3 de febrero de 2009

Como el viento

Ya no hay nada que quepa en mi, pues me quedé vacía el día que decidí tomar aquella dirección. Porque el viento tomó otro camino y yo me fui con el, como siempre, pero esta vez tu no me seguiste. Ahora meceré la arena de las playas, provocaré mareas y tempestades, porque tu no quisiste acompañarme. Destrozaré otras vidas y otros hogares, y cuando solo exista el caos, reinará el silencio. No quieras culparme entonces de las desgracias que causé, pues ya será tarde; porque ya es tarde, porque siempre ha sido tarde.
Solo quiero un camino que seguir pero hasta que lo encuentre, seré como el viento, imparable, inquieta y si es necesario también destructiva. Porque tu no quisiste acompañarme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario